lunes, 21 de noviembre de 2011

Enterramiento neolítico de San Martín de Montalbán (Toledo)

A pocos kilómetros  de San Martín de Montalbán en dirección a la Puebla de Montalbán  en la provincia de Toledo encontramos a mano derecha un camino de tierra que nos llevara  a la llamada senda de los fresnos del Torcón. En esta senda encontramos el enterramiento funerario del Neolítico de la edad del cobre que pasa muy desapercibido porque se mimetiza con el entorno y porque ni está restaurado, ni bien indicado, como suele pasar con este tipo construcciones prehistóricas. Os recomendamos que vayais fuera de la temporada de caza. El suelo esta plagado de cartuchos porque es zona de caza.


 Este dolmen de galería está formado por la superposición de menhires en posición vertical y otro apoyado sobre ellos en horizontal. La construcción, dispone de una puerta de acceso, un corredor y una cámara mortuoria en forma circular. Los bloques de granito los obtenían  introduciendo cuñas de madera húmedas en agujeros naturales o fabricados en las rocas con el resultado de que produjeran  grietas que permitían sacar bloques de menor tamaño.

Antes de los años 80 se presuponía que la meseta interior y fría estaba despoblada en el Neolítico. Sin embargo en estos últimos años se viene documentando nuevos yacimientos en la Meseta no solo de enterramientos sino también de asentamientos.

En el término de San Martín de Montalbán se han encontrado hachas de piedra pulimentada y restos cerámicos. También se sabe que la zona estuvo habitada por una población de origen celta, quizás de cierta importancia, ya que existen, aunque de forma dispersa, varios asentamientos y viviendas subterráneas, utilizadas en ese período, que nos hace pensar en una población de gran envergadura.


El estandarte más representativo del legado Celtíbero, es la estatuilla de “La Dama de Los Montes de Toledo”, que demuestra su adscripción artística por su forma fría y de aspecto inmutable, así como, la utilización de círculos concéntricos como detalles ornamentales.

Pero por allí también pasaron romanos, visigodos, musulmanes y templarios, dejando su huella con el puente canasta, la iglesia Santa María de Melque y el castillo templario de San Martín de Montalbán. De todo ello hablaremos en otra ocasión cuando volvamos a esta zona, un autentico lugar de poder que ya desde la prehistoria estaba habitado y que los templarios en su búsqueda de energias positivas también lo hicieron.

1 comentario:

Josifku dijo...

Ayer pasé por este lugar. Un lugar de enterramiento maravilloso, me dio mucha pena lo abandonado que está; algún día nos daremos cuenta de la importancia de lugares como este.